Revoluciona tu rutina de entrenamiento
·
Mezcla cardio y pesas. Si tu entrenamiento consiste solo en subirte en la cinta de correr,
añade también una serie de prensa de piernas y flexiones de brazos, empezando
con poco peso. Y si de lo contrario, lo único que haces en el gimnasio es un
circuito de fuerza, entrena en la elíptica el resto de días de la semana.
Prueba una nueva máquina de cardio y crea nuevos circuitos de fuerza cada seis
u ocho semanas para mantener tus músculos a tono.
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Usa los Programas. No nos sorprende que nuestros entrenamientos sean pesados y aburridos,
si lo que hacemos es subir a la cinta de correr, empezar a una velocidad
altísima y no variar nunca la inclinación o la velocidad. Añade variedad a tu
rutina de ejercicios cardio subiendo una colina o controlando tu ritmo cardiaco
trabajando con el programa de intervalos.
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Apúntate en alguna clase. Hacer alguna actividad de grupo es una de las formas más eficientes y
divertidas para pasar tiempo en el gimnasio. Prueba aquellas clases en las que
trabajes diferentes músculos.
·
Pide ayuda. Si no estas seguro/a
de cual es el siguiente paso en tu entrenamiento, quizás sea el momento de
acudir a un entrenador personal. Los entrenadores pueden ayudarte a ampliar tu
repertorio de ejercicios y te aseguras invertir bien tu dinero. Habla con los
entrenadores de tu gimnasio para encontrar aquel que te pueda ayudar a
conseguir tus objetivos.
LA FIBRA EN SU DIETA
La fibra es una parte
estructural de una planta que la sostiene y la mantiene como una unidad. La
fibra es importante porque estimula al tracto digestivo y lo ayuda a trabajar
en forma eficiente, fomenta la presencia de bacterias “buenas” en el intestino
grueso, suaviza las heces fecales (movimiento intestinal) y ayuda a prevenir el
estreñimiento, disminuye la absorción de carbohidratos haciendo las comidas más
agradables y ayuda al control del peso y en diversas investigaciones se ha
demostrado que el consumo de fibra disminuye la probabilidad de tener ciertos
cánceres del aparato digestivo.
Existen dos tipos de
fibra: soluble e insoluble. Las plantas generalmente contienen una combinación
de ambas fibras.
Fibra soluble:
·
Frutas
·
Vegetales
·
Legumbres
·
Avena
·
Cebada
·
Granos
La fibra soluble es
fragmentada por bacterias productoras de enzimas que se encuentran en el
intestino grueso para producir energía, gas y heces mejor formadas. Esta fibra
forma una especie de gel, que puede unirse a otras sustancias en el estómago.
También tiene otros beneficios, como la disminución de los niveles de colesterol
y mejora el control de los niveles de azúcar.
Fibra insoluble:
·
Frutas y
vegetales con piel y semilla
·
Cereales
de grano entero
·
Nueces
·
Legumbres
La fibra insoluble se
rompe con menor facilidad por bacterias que se encuentran en el intestino, pero
atrapa agua, lo que ayuda a aumentar el peso de las heces fecales. A esta fibra
se le conoce como “escoba natural” y tiene muchos efectos protectores en el
intestino.
La correcta
combinación de estos dos tipos de fibra asegurará la función adecuada del intestino,
por lo que es necesario balancearlos en la dieta diaria. Debe asegurarse que
todos los almidones o granos sean altos en fibra. Lea las etiquetas de los
cereales para confirmar el contenido, un cereal alto en fibra debe contener al
menos 5 gramos de fibra total por porción. Prefiera los panes de cereales
enteros (deben contener al menos 2 a 3 gramos de fibra por rebanada). Consuma
mayor cantidad de granos enteros como las pastas integrales y arroz.
No olvide tomar muchos
líquidos. Sin agua, la fibra dietética no funciona adecuadamente. En
particular, la fibra insoluble actúa como una esponja absorbiendo agua, aumenta
el tamaño y peso de las heces, lo que aumenta la presión en la pared del
intestino y facilita el movimiento de las heces. Sin agua o líquidos, la fibra
únicamente provocará estreñimiento. Tome 8 a 10 vasos de agua al día. Los
líquidos incluyen las bebidas sin cafeína y sin alcohol, té y jugo de fruta.
Hidratación: El Poder del Agua
Probablemente usted ha
escuchado que el agua es vital para la salud. Usted tal vez pueda sobrevivir
por seis semanas sin alimento pero definitivamente no va a sobrevivir por tanto
tiempo sin agua. Una pérdida de más de 20% del agua de su cuerpo es una amenaza
para su vida.
El agua es la
sustancia más abundante en el mundo. El cuerpo humano tiene de 55% a 75% de
agua, aproximadamente, y este por ciento va a depender de la composición
corporal, edad, género y otros factores. Entre más delgada es un persona más
cantidad de agua posee su cuerpo ya que el tejido con menos grasa absorbe más
agua que el tejido graso. Es por esto, que los hombres poseen mayor cantidad de
agua en el cuerpo que las mujeres, ya que las mujeres tienen mayor cantidad de
grasa corporal.
El agua tiene muchas
más funciones que solamente satisfacer la sed. Entre sus funciones vitales
dentro de nuestro cuerpo se encuentran: regular la temperatura corporal,
transportar nutrimentos y oxígeno a las células de nuestro cuerpo, transportar
los productos de desecho o desperdicios fuera de las células y del cuerpo,
actúa como humectante de la boca, ojos y nariz, es parte de los fluidos
corporales, tales como, saliva, sangre, fluidos estomacales y orina, ayuda a
prevenir el estreñimiento, entre otras funciones.
Existen circunstancias
en las que el requisito de agua puede aumentar. Necesitamos consumir más agua
cuando nos exponemos a temperaturas extremas, muy caliente o muy frío. Puede escucharse
extraño que cuando estemos en temperaturas frías necesitemos consumir más agua.
La costumbre es tomar más agua, por ejemplo en verano, que hacer calor. Pero de
igual manera, tanto en temperaturas extremas frías y calientes, el cuerpo
utiliza más agua para mantener la temperatura normal del cuerpo. El requisito
de agua también aumenta con ejercicio o trabajo extremo, durante el embarazo y
la lactancia y con síntomas como diarreas, fiebre y vómitos.
Para aumentar el
consumo de agua usted puede:
·
• • En lugar
del tomar el tan conocido “coffee break”, consuma agua.
· • Complementar
sus comidas o hacer una merienda con agua, leche o jugos sin azúcar añadida.
· • Consumir
agua antes, durante y después de hacer ejercicio. Puede consumir también una
bebida con electrolitos al concluir el ejercicio.
· • Tener
siempre con usted una botella de agua
Las bebidas que
contienen cafeína, como el café, té y los refrescos, no son buena fuente de
agua ya que actúan como un diurético y causan pérdida de líquido a través del
aumento en la orina.
¿Por qué un músculo se quema?
Músculo
"quemado", sobre-fatigado o sobre-entrenado, son sinónimos.
Un músculo se
"quema", cuando se ha entrenado de forma intensa por varios días, sin
proporcionarle el tiempo suficiente de recuperación entre una sesión de
entrenamiento y otra.
Los efectos
de este sobre-entrenamiento son
la disminución en la
capacidad de crecimiento y fuerza muscular, por lo que el músculo ya no progresa
en volumen ni en fuerza.
·
¿Qué debemos
hacer para evitar
el sobre-entrenamiento muscular?
Es fácil,
simplemente debes permitirle a cada músculo en particular, un tiempo adecuado
de recuperación. En el caso
de los ejercicios de musculación, cada músculo no deberá ejercitarse en
un tiempo menor de 36-48 horas.
Recuerda que
durante el período
de descanso, es cuando las fibras
musculares se reconstruyen.
Y es en
este momento, que
se va adquiriendo mayor fuerza y volumen. La premisa
de que un músculo crece durante el descanso, es cierta.
·
Las
siguientes recomendaciones, te evitarán
una sobre-fatiga muscular:
1) No trabajes
nuevamente un músculo, en un tiempo menor de 36-48 horas.
2) No deberás
realizar actividades intensas,
durante el período
de descanso (como practicar algún otro deporte).
3) Cada cierto
tiempo de entrenamiento continuo, es conveniente un
período de descanso mayor. Por ejemplo,
si llevas un promedio de 3 meses practicando ejercicios de musculación con una
frecuencia de 4 a 5 veces
por semana, sería adecuado un descanso de una semana completa. Incluso regresarás al gimnasio con mayor
fuerza.
Los cuatro pilares fundamentales de la musculación
1.
Rutina
adecuada para volumen muscular:
No cualquier tipo de
entrenamiento realizado en un gimnasio, aumentará nuestra masa muscular. El
tipo de entrenamiento que ha probado incrementar el volumen muscular, es aquel
que incluya el levantamiento de pesas, realizados de forma regular, siempre y cuando cumpla dos
características:
1.1) Incrementos constantes
1.2)
Variaciones en las rutinas.
Los incrementos
constantes, se refieren al aumento progresivo pero constante del peso o del
número de repeticiones, con lo cual
evitaremos la falta de progresión muscular.
Las variaciones
periódicas en las rutinas, se refieren a los cambios en el tipo de ejercicios
que debemos realizar, lo cual
es adecuado llevarlo a cabo en un tiempo promedio de cada 3 meses.
Estas dos
características, deberán ser
cumplidas en un
entrenamiento de musculación,
para estimular la reparación adecuada por parte del organismo y
el incremento muscular
compensatorio.
2.
Dieta de musculación:
Si nuestro
objetivo es el incremento del peso corporal magro, necesitamos una dieta rica
en proteínas de alto valor biológico y con cantidades suficientes de
carbohidratos para compensar el gasto energético por el ejercicio.
También es preferible
distribuir su dieta de musculación en varias comidas al día, en un número de 5
ó 6 comidas al día.
3.
Suplementación nutricional:
La suplementación es
importante (aunque quizás no tan
esencial como los otros), como parte
del incremento proteico en la dieta.
Se recomienda utilizar
proteínas con digestibilidad e índice químico alto.
4.
Descanso suficiente:
El reposo
muscular posterior a una sesión de entrenamiento, es tan importante como la
misma sesión de entrenamiento, sin el cual los progresos no se harán muy notables. Se recomienda un período no
menor de 36 a 48 horas, entre un entrenamiento y otro para un determinado grupo
muscular.
5 TIPS PARA CUIDAR TU SALUD EN LA OFICINA
Te presentamos cinco
tips que puedes practicar en la oficina para no sufrir los estragos de
estar todo el día sentado, comiendo y sin mucha actividad física.
¡Párate!: El pasar muchas horas sentado
puede afectar tu circulación y causar más adelante problemas cardíacos o
estéticos como las famosas varices Intenta levantarte y estirarte cada hora;
esto, además de ayudar a tu salud, será una buena oportunidad para tener algo
de actividad física. Haz todo lo posible para caminar: desde dejar tu carro en
la siguiente cuadra, hasta evitar el elevador o escaleras eléctricas.
Tomar
constantemente agua natural: El agua entre sus propiedades como oxigenador del
cuerpo, también nos ayuda a desechar esos excesos que muchas veces no
necesitamos; nos ayuda a mantener un estado de saciedad y con esto evitando la
chatarra que en muchas ocasiones podemos llegar a injerir.
Prepara
tus alimentos: Muchas veces es difícil llevar esta tarea, pero sin
lugar a dudas es lo más recomendable. Llevar tu dieta a la oficina evitará que
comas toda esa comida con muchos carbohidratos y grasas que no necesitamos.
Intenta consumir manzana como snack por su alto contenido en fibra que, en
juego con el agua, te ayudarán a no tener tanta hambre además de llenarte de
energía.
Mantén
una postura correcta: El mantener la espalda baja bien
recargada nos evitará problemas más adelante, además de que una buena postura
también ayuda a tener una buena oxigenación.
Estírate: Estírate en todo momento posible