La importancia de un enfriamiento adecuado
El enfriamiento y estiramiento después de un
entrenamiento no garantizan que haya un menor dolor muscular después del
deporte, pero sí reducen el riesgo de lesiones y ayudan a volver a estabilizar
la temperatura corporal y la frecuencia cardíaca.
¿Por qué?
El propósito del
enfriamiento es reducir gradualmente la frecuencia cardíaca previamente elevada
durante el ejercicio, por lo que comience su enfriamiento con un ejercicio de
baja intensidad. Es mejor disminuir sus niveles de intensidad poco a poco ya
que poner fin a su actividad de forma abrupta baja la presión arterial a un
ritmo rápido, lo que podría causar mareos o desmayos. Una vez que el ritmo
cardíaco vuelva a la normalidad, es hora de estirar.
Un buen enfriamiento ofrece una serie de beneficios,
incluyendo:
• Hacer que el ritmo de los latidos del corazón y la respiración vuelvan a la normalidad
• Ayudan a evitar desmayos o mareos, lo cual puede darse si el ejercicio es detenido de repente
• Reducción de los efectos post-ejercicio como los espasmos musculares, calambres y rigidez
• Mantiene la flexibilidad y el rango de movimiento intacta
¿Por cuánto tiempo?
Un enfriamiento se
debe realizar después de cada entrenamiento. El estiramiento durante su
enfriamiento ayudará a relajar y alargar los músculos, y mejorar la
flexibilidad. Tratar de tocar sus extremidades entre 20-40 segundos cada uno.
Entre 10 y 15 minutos de tiempo de enfriamiento permite que su ritmo cardíaco y
su respiración vuelvan a la normalidad. Después de hacer ejercicio o una
actividad física extenuante, es importante disminuir la temperatura de su
cuerpo poco a poco disminuyendo la actividad entre tres y cinco minutos y
realizar estiramientos durante cinco a 10 minutos.